Los incidentes se produjeron luego de que el árbitro adicionara diez minutos, tras los 90 oficiales. El local dio vuelta el resultado, lo que hizo que se desatara la furia de los visitantes.
El encuentro disputado en cancha de Bowen, correspondiente a la 7ma fecha del Clausura, había comenzado mucho mejor para Colón, que arrancó ganando con gol de Nicolás Arce. Sin embargo en el complemento y tras un penal atajado por el arquero rojinegro, Lautaro Fernández igualó para la visita.
La furia se desató luego de que Bowen anotara el segundo, a través de un gol convertido por Lucas Alférez a los 52 minutos de partido. El blanco de los ataques fue el árbitro Alexis Tudela y sus jueces de línea por haber adicionado 9 minutos más a los 90 oficiales.
Fue en ese momento que simpatizantes de la visita ingresaron al campo de juego para agredir al árbitro y a sus asistentes, provocando la inmediata suspensión del encuentro.