Los malvivientes pergeñan nuevas formas para sustraer dinero a sus víctimas. Frente a esto, advierten a los vecinos del departamento a que no brinden ningún tipo de dato bancario.
El día viernes en horas de la tarde, la víctima comenzó a recibir mensajes de Whatsapp de un conocido, el cual le hacía saber que se encontraba en Cuba y que necesitaba enviar unas valijas, pero debía pagar una multa por un exceso de peso en el equipaje, por lo que le pidió que le acredite cierta cantidad de dinero. Confiada, la víctima le transfiere el dinero, sin embargo, luego descubrió que había sido engañado porque a través de la aplicación de Facebook constató que su amigo informaba que había sido hackeado su cuenta de Whatsapp.
Otro hecho se dio el día domingo, cuando una persona recibe un llamado telefónico donde el interlocutor le hizo saber que representaba la empresa Átomo, y que había sido ganador de un premio de dinero en efectivo, pero para recibirlo debía indicar un CBU para que quedara vinculado al CBU de la empresa y así cobrar el dinero. La víctima indica el CBU de la tarjeta de su madre, pero lejos de recibir un premio, el estafador solicitó un préstamo por más de 400 mil pesos a su nombre.